miércoles, 19 de agosto de 2015

INVOLUCRARSE

Miércoles 19 de Agosto de 2015 a las 20:15h desde Sunshine Shop con Akash y Sanyai

Hace días que no escribo y no ha sido por una cuestión de cansancio...desde que los voluntarios se han marchado estamos cerrando temas a un ritmo muy tranquilo, no estamos madrugando demasiado y nos vamos a dormir mas o menos pronto...tampoco ha sido por una cuestión de encontrarme mal...porque fisicamente me encuentro bien, mejor que cualquier año... con fuerzas y con energía...este año no he tenido ni una sola diarrea...ni un solo dolor de tripa y ni un solo amago de ponerme enferma...mi cuerpo se ha adaptado definitivamente a este país...pero no lo ha hecho mi cabeza amigos...y ese es el motivo principal de no haber sido capaz de sentarme delante del folio en blanco a contaros lo que han sido estos días de “independencia”...

El sábado fue un día difícil en el cole de fin de voluntariado...ya os lo dije...fue uno de esos días de bajón absoluto después de haber estado sometida a mucha presión durante semanas...y es que amigos...coordinar al grupo de voluntarios es un desgaste muy bestia y algo que hago desde hace un par de años un poco por que no me queda otro remedio...supongo que habrá mil cosas que podría hacer mejor...y estos días os confieso que he pensado en cuando me llegará el reemplazo...estoy cansada...y creo que esto se transmite...y me gustaría algún día volver a ser una voluntaria mas...volver a disfrutar de una mañana de médicos...de una tarde de talleres...de olvidarme de listas, de nombres, de médicos y de organizar con el Brother...con las enfermeras, con las massies...que me digan lo que tengo que hacer...sin más...y hacerlo y disfrutarlo...quiero volver a vivir esto como la primera vez...quien  sabe...quizá algún día...veremos...

El domingo fue un día si cabe peor...estaba soñando desde hacía días con ir a ver a Rashida y a Sharuk a su casa...y creo que no fue buena idea...fue un día precioso de estar a su lado y hablar largo y tendido...de disfrutar de su compañía sin prisas y sin interrupciones, un día de mucho cariño y de emociones a flor de piel.... Pero fue duro...y reconozco que es mejor vivir en la ignorancia...y ahora que escribo esto me parece cruel lo que estoy diciendo y me siento fatal...pero es que desde el domingo he sido incapaz de quitarme de la cabeza la imagen de aquella casa de juguete al borde del delta...no puedo imaginarme como mi pequeña Rashida y su hermano pueden pasar un día sin nada que llevarse a la boca...no dejo de pensar en que harán cada vez que caen cuatro gotas del cielo...desde el domingo vivo obsesionada con como poder ayudar a esta familia...ninguna de las opciones es buena...dudo mucho que podamos ayudarles y no se como van a salir adelante...y me siento vacía al no poder hacer nada...

El lunes fue un día tranquilo de médicos...día de dentista con los pequeños...vuelta al cole y visita a la casa de los mayores que estaban en su hora de estudio...un día tranquilo de disfrutar de los niños...de disfrutar de los momentos mágicos que nos regala este proyecto...de las lecciones de los pequeños que se sientan en el dentista y se dejan hacer sin cambiar el gesto...apretando los puños y los deditos de los pies con fuerza...día de disfrutar de esa hora de silencio y de estudio en Baganpara con los niños... Pero estoy triste y creo que hasta los niños lo notan...en el camino a Baganpara me llama Bubai Jana que se fue del cole hace ya casi dos años...quiere verme...quiere que cenemos juntos...y yo quiero verle...pero no he superado el día con Rashida y ahora Bubai...estoy emocionalmente muy tocada...pero soy incapaz de negarme...así que quedamos en el McDonalds y aparece con Rayan...madre mía estos chicos...que vamos a hacer con ellos...cenamos, charlamos, nos reímos... y Bubai me pide con mucha vergüenza que le cambie a rupias un billete de 10€ (supongo que se lo dio algún voluntario que ha pasado por aquí) necesita dinero para hacerse un scanner de la rodilla y para comprar medicamentos...no puedo con todo esto...Bubai esta estudiando y trabajando a la vez...solo tiene 18 años...y no puede ni pagarse las medicinas...volvemos al hotel con la cabeza baja...otro día duro...muchos no lo entenderéis pero es que son nuestros niños...nuestra familia india...y a no puedo evitar preocuparme y sufrir por lo que les pasa...

Es lo que pasa cuando uno se involucra tanto en las cosas...y llevo tres días pensando de manera obsesiva en que hacer para desvincularme...¿quizá ha llegado el momento de descansar?...¿Y quien va a continuar con esto?... Necesito poner distancia en todo esto...necesito tiempo para digerir lo vivido...cada año estos niños son mas importantes para nosotros...cada año les conocemos mejor y nos metemos de lleno en sus vidas...y hoy son Rashida, Sharuk, Bubai, Rajan, Sharmila, Basanti...y mañana serán otros...y no podemos ayudar a ninguno mas de lo que ya estamos haciendo...tienen que hacerlo ellos...pero son niños...que difícil amigos...que duro vivir en este país...que injusto...

Solo nos quedan aquí tres días...hemos trabajado muy duro y hemos hecho muchas cosas en cuatro semanas...ha sido intenso...emocionalmente ha sido el peor año de todos con diferencia...mucho os lo he contado...pero la mayor parte de lo que he sentido me lo llevo conmigo...y ya irá saliendo...si es que tiene que salir... empiezo a pensar en como cerrar este año...y ya veremos si hay siguiente...no quiero pensar en eso ahora...porque quiero...con todo mi corazón...pero no se si podré...

2 comentarios:

  1. No se que decirte Maite dolo se me ocurren dos palabras: ánimo y GRACIAS.
    Besos
    Lorena

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  2. Está siendo muy duro pero te conozco y sé que eres fuerte; una fortaleza que se nutre de tu generosidad y de tu capacidad de soñar. Te dejo otros versos de Lluís Llach como en uno de los primeros correos:

    No empobrezcas el sueño,
    no tengo otra cosa que decirte...
    no empobrezcas el sueño,
    que es como la estrella que hay al final del camino.

    Y si es preciso reharemos todos los signos
    de un presente tan difícil y arisco
    pero no empobrezcas tu sueño nunca más.

    Abrazo grande.

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